-Déjame sentarme y te sigo contando. - Dijo casi perdiendo el suspiro. -No sé que manía tenéis los jóvenes de ataros al pasado-
-Así no se pierde abuela.
-Ooh, si se pierde, el pasado siempre se pierde, yo sé mucho de eso, se desdibuja y se va borrando, y esa es la forma más triste de perderlo porque es inevitable, se borran las caras, las sonrisas, los lugares… se borra todo. Y se queda un vacío inevitable, como un puñado de otoño…
-Abuela por favor sígueme contando
-A si ¿por dónde iba?
-Pidió una rebanada con mermelada….