Una brizna de hierba.

Imaginate que al final nos extinguimos como especie humana, pero por alguna extraña razón nos dejaron seguir jugando, pero esta vez sólo como espectadores..
! Cómo animamos entonces a los chimpanceses y gorilas, l Con que pasión ! ¡Si al final ,eran tan como nosotros !
Vamos, dale tio, dale , dale, evoluciona ! Tu puedes mono.!
Pero habíamos dejado las cosas un poco feas, y los monos a su vez se extinguieron.

Entonces animamos a los elefantes y a los caballos, que eran no exactamente igual... pero , sin humanos ni monos, eran casi tan como nosotros.

Pero estos a su vez desaparecieron.

Así que animamos a los perros, que ahora que la memoria de lo humano se iba perdiendo, parecían casi idénticos a nosotros.

Cuando los perros desaparecieron, adorábamos a los gatos... las ardillas...

Pero estos y casi todas las criaturas terrestres, también se extinguieron.
Entonces animamos y admiramos a los pájaros, y cuando al fin también estos se fueron,
nos quedó sólo el mar, y los delfines y ballenas, que ya casi completamente olvidado lo humano
éramos casi nosotros de nuevo,
hasta que también se sumergieron en lo profundo para no más volver.
y así amamos y adoramos a los pulpos, que también nos dejaron,
a los calamares,
a los atunes y a las sardinas.
a las estrellas de mar y a las medusas,
Y un día también que nos dejaron.

Y así animamos a todas esas criaturas, hasta que todos los animales dejaron de existir.

Fue entonces, y sólo entonces nos fijamos bien en los árboles, en las plantes,

esa vida tan lenta y cuidadosa, pero sin memoria ya de humanos o animales, tan hermosa en sí misma y tan variada, tan perfecta,
pero los árboles también desaparecieron,
y entonces cuanto animamos y amamos a las plantas, a los girasoles, a los calabacines, y a los geranios,
! vamos calabazín tu puedes !
Pero calabazin no pudo y practicamente todas las plantas y flores también se extinguieron.

y entonces quedaron ya sólo unas pocas briznas de simple hierba cubriendo pequeños lugares,

y juntamos las manos, y cerramos los ojos, e imploramos, a la hierba y a la tierra que la alimentaba!

hierba, por favor , por favor, por favor ! Tu puedes hacerlo! sobrevive !

Y sí, la hierba sobrevivió, la lluvia siguió cayendo y una nueva y variada naturaleza volvió a crecer y cubrir el planeta.

Y sí, exactamente, esa es la admiración y el respeto que le debes.